La temperatura, aunque difícil de definir, es posible obtener mediciones de ésta en múltiples formas y con diferentes elementos. La Física térmica es una rama de la física que estudia la temperatura, la trasformación de la energía y los fenómenos de transferencia.
Aunque el fuego se conoce desde los inicios mismos de las civilizaciones humanas, no fue sino hasta mediados del siglo XVIII que los científicos y estudiosos de la época se dieron a la tarea de investigar los fenómenos que ocurren alrededor del monitoreo de temperatura y comenzaron a entender la diferencia de conceptos entre los cuerpos calientes y los fríos.
Con anterioridad se creía que cuando algo se calentaba, a éste se le añadía una especie de fluido imposible de ver, un fluido que denominaron “calórico”. De esta forma, los cuerpos o sustancias frías contenían menos fluido calórico que los calientes, esto explicaba también cómo es que los objetos como los metales, al calentarse, aumentan de tamaño, pero resultaba imposible explicar el por qué se calentaban las manos al frotarlas una contra la otra.
A mediados del siglo XIX, se desechó la teoría del fluido calórico y se desarrolló una nueva, denominada teoría cinética, la nueva propuesta decía que la materia estaba compuesta por átomos y moléculas y que los objetos o sustancias calientes tenían dichas moléculas en constante movimiento, esto generaba energía; por el contrario, los objetos fríos tenían moléculas con mucho menor movimiento y en consecuencia, menor generación de energía. A esto le conocemos actualmente como energía térmica de los cuerpos, ésta puede ser transmitida de tres formas:
La conducción. Esta transferencia de energía ocurre cuando las partículas de determinado cuerpo chocan entre ellas y transfieren energía cinética a las partículas con menor temperatura. Podemos ejemplificar esto con un acontecimiento cotidiano, al calentar un sartén para cocinar un huevo frito, el calor es transferido al sartén y éste se calienta, a su vez este sartén caliente transferirá el calor a la comida.
La convección. Ocurre en los líquidos y gases, la diferencia de temperatura entre éstos provoca su movimiento, por ejemplo, los movimientos de convección que ocurren dentro de la atmósfera de nuestro planeta, son los responsables del estado atmosférico y del clima. Existen habitaciones dentro de las casas y oficinas que son más frías que otras, esto ocurre como consecuencia del movimiento de las corrientes de aire en ella.
La radiación. Ocurre cuando el calor es transferido mediante ondas electromagnéticas, la radiación tiene la particularidad de poder ser reflectado o refractado, es decir, que una parte de él sea absorbida y otra sea reflejada. El calor solar es el ejemplo más claro del fenómeno de la radiación, cuando alguien dice que vestirse de color negro en pleno verano “da calor”, se refiere a la capacidad de los objetos obscuros de absorber y retener el calor transferido por radiación.
Ahora bien, si el calor es la energía térmica que un objeto tiene y es la energía que fluye como consecuencia de una diferencia en la temperatura. ¿Qué es la temperatura? La temperatura es la medida de dicha energía.
La necesidad de entender estos conceptos a través de la historia se ha visto acentuada por la relevancia que éstos tienen en diversas materias como la construcción y fabricación de artículos, la medicina e incluso en la cocina. En la actualidad, en procesos industriales como el ensamble de un auto dentro de una fábrica, se ven en la necesidad de implementar el monitoreo de temperatura en diferentes etapas del ensamble, cuidar que los robots no sobrecalienten sus partes para seguir operando, tener la temperatura adecuada para lograr fundir y unir así diferentes secciones de metal, darle forma y poder moldear con facilidad a las diferentes partes que conforman un auto, tener un proceso de pintado y secado rápido, que el pegamento selle a la temperatura adecuada, etc. De la misma forma el monitoreo de temperatura está presente en procesos tan cotidianos como el cuidado de los alimentos y las temperaturas de los refrigeradores, o en el proceso de elaboración de un buen vino.
La globalización nos ha obligado a poner parámetros internacionales los cuales debemos de cumplir en cualquier parte del planeta, para comprobarlo es necesario el monitoreo de temperatura, esto se ha llevado mediante gráficas, ahora con archivos los cuales no se pueden modificar, esto avalado obviamente por laboratorios certificados.
La tecnología y la variedad de controles de temperatura en la actualidad nos permiten incluso automatizar y regular de forma autónoma situaciones como el clima de una habitación, los transductores de temperatura emiten una medición de la temperatura ambiente indicando al aparato si ésta se encuentra en la medida adecuada o si es necesario realizar un ajuste. Es por esto que el aire acondicionado de la oficina puede encenderse solo repentinamente y en varias ocasiones.
No importa el ramo al que te dediques, si tienes la necesidad de monitorear y tener control de la temperatura en tus procesos, en JM Industrial podemos ayudarte. Trabajamos con sistemas de monitoreo de temperatura con tecnología inalámbrica, vía WiFi, vía computacional o celular. Manejamos paquetes para el monitoreo de temperatura o cualquier otra variable. Los paquetes incluyen un hardware (como: equipos, tarjetas, instrumentos), interface (convertidores de señal industrial que llegan al PC) y un software (para el monitoreo continuo, los registro y análisis de las lecturas).
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